Diciembre es uno de los meses más marianos por excelencia.
Ya en las vísperas del comienzo de los últimos 30 días del año, el 27 de noviembre, María se nos presenta Milagrosa, entregando en su aparición una Medalla, escudo fiel y amuleto afortunado de todo aquel que la lleve siempre consigo.
En la ermita ruteña de la Vera+Cruz, anualmente se le rinde homenaje a la Medalla Milagrosa. Este año, como es tradicional, la imagen salió de su habitual hornacina para presidir el altar de la ermita, siempre rodeada de una mandorla de luces, iluminada. Un solemne triduo y una Función religiosa, con Besamedalla incluido, fueron los actos principales de la celebración.
En poco menos de una semana, el 8 de diciembre, celebraremos la Inmaculada Concepción de María. Ya desde el vientre de su madre, Santa Ana, María era pura, pues nació sin el Pecado Original al que todos los mortales fuimos condenados desde la expulsión de Eva y Adán del Paraíso y que se redime con el Bautismo.
Tan alto misterio también tiene representación en la casa de La Morenita. Un pequeño y austero camarín a la derecha de la íntima habitación de la Reina de Rute acoge durante todo el año a una hermosa efigie de la Inmaculada Concepción.
Durante estos primeros días del mes de diciembre, también sale de su ubicación habitual para que se le rinda culto en los días previos a su onomástica. Después habrá de llegar el día de Nuestra Señora de la Esperanza (18 de diciembre), la llegada a Belén, el santo Parto y Nacimiento de Jesús... Pero esos son ya otros cantares.
Son celebraciones, las de la Milagrosa y la Inmaculada, que aunque no especialmente multitudinarias e importantes en nuestro pueblo, sí que existen, como una de tantas muestras latentes del infinito Amor que María nos da y que debe ser, en todos los sentidos, recíproco. Al fin y al cabo, María, siempre María, cualquiera que sea su advocación, como intermediaria y abogada nuestra... y desde siempre y por siempre...
SINE LABE CONCEPTA
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3 comentarios:
Manífico texto de una digna pregonera: dulce amante de las palabras más bellas y acertadas en cada momento. Ánimo en tu cometido una vez más; fuerza para el camino siempre. La mirada en María, las manos al papel. Amiga mía, pregonera de la Virgen, esas palabras que escribes llenan el alma.Aquí has encontrado un fiel seguidor de tu blog y un compañero de pregón, un fiel oyente y un café siempre que lo necesites. Porque a pesar de que el camino es precioso, es también difícil de recorrer a solas. Un pregonero necesita esos cafés al filo de la noche, al borde de la tarde y de una taza a medio llenar.
Compañera, amiga, un abrazo. Entrar en tu blog es un consuelo en las noches perdidas...Gracias por mostrármelo y gracias por llenarlo de María.
Querido Pregonero Carmelitano: No acostumbro a contestar los comentarios, pero este caso es realmente excepcional. Gracias por tus hermosas palabras y, por una hermosa frase, esa que dice "La mirada en María, las manos al papel". ¡¡Realmente genial!! Sabes más que de sobra que no estás solo en el camino, y aunque el año de nuestros respectivos pregones no hubiera coincidido, igualmente me tendrías junto a ti en todo lo que necesitaras, ya que hemos caminado juntos y a la par durante los primeros años de nuestra vida. Cuenta con todas las noches, tardes y mañanas, con todos los cafés, infusiones y refrescos, con las tazas medio llenas, medio vacías, llenas o vacías al completo que necesites. Gracias a ti por abrir tu corazón y ofrecerme tu brazo para apoyarme en él.
Nunca olvides tus propias palabras: "LA MIRADA EN MARÍA, LAS MANOS AL PAPEL"
Gracias, amigo, compañero...
INMA:
QUE NUESTRA MORENITA TE ILUMINE Y TE CONCEDA LA CLARIVIDENCIA PARA PREGONARLA COMO ELLA SE MERECE.
FELICIDADES INMA
Antoñi y Vicente
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